domingo, 11 de junio de 2023

SALVIA. CARACTERÍSTICAS

 


La conocida salvia debe su nombre al término latino “salvare”, sanar/curar, por ello es considerada la “hierba de la salud”. 

Al igual que hoy en día, tiene un uso más medicinal que culinario, pero veamos cómo era vista en las fuentes clásicas.

Nos llama la atención que es una planta aromática que aparece pocas veces en los tratados de agricultura o en las recetas de cocina que nos ha legado el mundo grecorromano. En principio su uso era principalmente medicinal pues no aparece como uno de los condimentos estrella de los menús clásicos.

En Ateneo, IV, 170 A leemos una enumeración de los condimentos entre los que destaca la salvia:

“Alexis ha elaborado un catálogo de condimentos  en La caldera, de este modo [PCG II, fr. 132]:

 A— *** nada de excusas aquí para mí, ni de «no tengo».

B— Bueno, dime lo que te hace falta, que yo te lo conseguiré todo.

 A— De acuerdo. En primer lugar, ve y consígueme sésamo.

B— Pero si lo hay dentro.

B— Pasa machacada, hinojo, eneldo, mostaza, tallo y jugo de silfio, cilantro seco, zumaque, comino, alcaparra, orégano, cebolleta, ajo, ajedrea, salvia, vino dulce, tordilio, ruda, puerro”

Fragmentos de la comedia media, 132. “Ateneo, IV 170 A. Una lista de especias la hizo Alexis en La marmita así: (A) Pasa molida, hinojo, eneldo, mostaza, tallo y jugo de silfio, cilantro seco, zumaque, comino, alcaparra, orégano, cebollino, anís, tomillo, salvia, arrope de mosto, pimienta, ruda, puerro”

E incluso, lo cita en una receta de espárragos: “Se dice así por lanzarse (éxoroúein) y crecer. Antífanes, por su parte, lo llama aspáragos, con -p- [PCG II, fr. 294]: El espárrago brillaba, y la alverjana había florecido. Aristofonte [PCG IV, fr. 15]230: «Alcaparra, poleo, ajedrea, espárrago, pez, aladierna, salvia, ruda” (Ateneo, II, 63 A)

Aristófanes, Tesmoforias, 484 habla sobre su empleo de manera triturada: “Y mientras él se ponía a triturar bayas de enebro, anís y salvia, yo, untando los goznes bien de agua para que no chirriaran, salí en pos de mi amante, y después de estar con él, me senté a horcajadas sobre un poste junto al templo de Apolo Caminante, agarrándome a una mata de laurel”

Menandro, El misántropo, 600 nos hace pensar que no se le daba mucho valor en la cocina: “Peleando con piedras que solo dan tomillo y salvia, gana penas sin recoger nada bueno”

 

No obstante, eran conocedores de los diferentes tipos de salvia existente, como por ejemplo la officinalis, la tribola L., la pomífera L., la viridis L, la horminum L, la calicina, entre otras.

Dioscórides, III, 33 habla de los tipos y su denominación: “La salvia. Unos la llaman lelbhaskon; otros, sphákon; otros, kissíon; otros, sphágnos; otros, békion; los egipcios, apousí; los romanos, salvia; otros, kórsalon. Es una mata alargada, de muchas ramas con los tallos cuadrados y blanquecinos; las hojas son parecidas a las del membrillero, más alargadas, ásperas y espesas, insensiblemente como las partes gastadas de la ropa abigarradas, blanquecinas, de olor muy penetrante, en exceso. Tiene el fruto en la extremidad de los tallos como la gallocresta. Crece en zonas ásperas.

Teofrasto, VI, 1, 4 hace mención a dos tipos de salvia: “Hay muchas clases de tales plantas y presentan grandes diferencias entre sí, como la jara, la brionia, la rubia ", el aligustre, el torvisco (knéoron) la, el orégano, tomillo salsero, la salvia calicina (sphákos), la salvia triloba (elelísphakos), el marrubio, la coniza, el torongil y otras por el estilo”

Teofrasto, VI, 2, 5 explica sus diferencias: “La salvia calicina y la salvia se diferencian en que una es cultivada y la otra es silvestre, y porque la hoja de la primera es más suave, más pequeña y menos suculenta, y la hoja de la segunda es más áspera […] la hoja más redonda, como la de la salvia calicina (sphákos) es poco jugosa y las entalladuras son menos visibles y los ángulos menos pronunciados.”

Plinio, XXII, 71 también nos comenta sus características y usos: La planta llamada por los griegos "elelisphacos", o "sphacos", es una especie de lenteja silvestre, más ligera que la cultivada, y de hoja más pequeña, más seca y más olorosa. También hay otra de ella, de naturaleza más salvaje, y poseída de un olor fuerte, siendo la otra más suave. Tiene  hojas en forma de membrillo, pero blancas y más pequeñas: generalmente se hierven con las ramas. Esta planta actúa como emenagogo y diurético: y proporciona un remedio para las heridas infligidas por la raya,  que tiene la propiedad de adormecer la parte afectada. Se toma en bebida con ajenjo para la disentería: empleada con vino acelera la catamenia cuando está retardada, teniendo su decocción el efecto de detenerla cuando está en exceso: la planta, aplicada sola, restaña la sangre de las heridas. También es una cura para las picaduras de serpientes, y una decocción en vino alivia el prurigo de los testículos. Nuestros herbolarios de hoy en día toman por los "elelisphacos" de los griegos la "salvia"  de los latinos, planta parecida en aspecto a la menta, blanca y aromática. Aplicado externamente, expulsa el feto muerto, como también los gusanos que se reproducen en las úlceras y en los oídos”

Plutarco, Moralia, III, 662 E la cita el fragmento de Eupolis poeta griego en el que habla de diferentes plantas aromáticas por su olor y propiedades conjuntamente con otras hierbas: “Pastamos en un variado bosque, delicados brotes de abeto, carrasca, y madrotio / ramoneando y, además de éstas, aún otras, / cítigo y aromática salvia y tejo muy frondoso, / acebuche, lentisco, fresno, (álamo blanco ), alcornoque, roble, yedra, brezo blanco, / tamariz, aladierna, verbasco, asfódelo, jara, haya, tomillo, ajedrea "

Macrobio, Saturnales, VII, también hace referencia a Eupolis que ha de ser tenido entre los elegantes poetas de la comedia antigua. Este en la obra que tituló Cabras presenta a las cabras dirigiéndose las siguientes palabras acerca de la abundancia de su comida: [9] Nos nutrimos de plantas de toda clase, abeto, espinosa [coscoja y madroño, triscando sus tiernas yemas, y además auforbia, hierba medicinal, y salvia olorosa y frondosa campanilla, aligustre, lentisco, fresno, pino, carrasca, hiedra, erica, sauce, frángula, gordolobo, asfócelo, heliantemo, encina, tomillo, ajedrea”

Además de destacar por su aroma, llama la atención su aspecto. Porfirio, Aeronáuticas Órficas, 915 y ss: “Y en su interior, en el fondo del recinto, sucede un bosque sombreado por sus frondosos árboles, en el que hay muchos laureles, cornejos y esbeltos plátanos y hierbas que se cubren por una bóveda de raíces que dan en tierra: el asfódelo, la maravilla, el hermoso culantrillo, el junco, la juncia, la verbena, la anemona, la salvia, el erisimo, el ciclamen divino, la lavanda, la peonia y el policnemo de abundantes ramas, la mandrágora y la zamarrilla”

En otras entradas hablaremos de sus usos médicos y mágicos

Plurimam salutem!

2 comentarios:

Candela dijo...

Gracias por el aporte. Además, la salvia puede ser de gran utilidad como refuerzo cognitivo durante el ejercicio agotador. Así lo afirma un estudio centrado en los beneficios del extracto de salvia.

Charo Marco dijo...

Muchas gracias por el comentario. Saludos