domingo, 20 de febrero de 2022

UTENSILIOS DE SACRIFICIO. LIBATIO

Hace unas semanas hablamos sobre los utensilios utilizados en la lustratio previa a los sacrificios. 

A continuación vamos a centrarnos en los objetos que se utilizaban en las libaciones. 


Una libatio consistía en un ritual religioso en el que se ofrecía a las divinidades diferentes líquidos (vino puro, leche, miel, hidromiel, e incluso, agua), arrojándolos al suelo o sobre un altar.

Para poder realizar estas ofrendas se necesitaba del uso de diversos de recipientes en los que contener el vino puro o los otros productos entregados.

Las fuentes clásicas nos referencian varios nombres como guttus y simpuvium (también llamado simpulum)

Veamos qué nos cuentan las fuentes clásicas de estos objetos.

Varrón, L. L, V, 124 nos explica su etimología:  "Quienes echaban el vino de manera que lo vertían poco a poco, a partir de guttae (gotas) dieron el nombre al recipiente llamado guttus; quienes lo toman poco a poco, a partir se sumere (tomar) le dieron el nombre de simpuvium

Juvenal, VI, 343 habla del simpuvium a modo de escudilla: "¿Quién se atrevería a reírse de la copa y de la negra escudilla (simpuvium) de Numa y de los frágiles platos de barro fabricados en el monte Vaticano?"

Plinio Hist.Nat. XXXV, 46 (158) cita de nuevo el término simpuvium como si fuera una cuchara: “En la actualidad, incluso, en medio de la riqueza que poseemos, hacemos nuestra primera libación para el sacrificio, no con jarrones o vasos murrhine de cristal, sino con de las cucharas de loza (simpuvia).

En Festus, leemos “Simplum (o simpulum) cazo para hacer libaciones de vino”, en este caso se le describe como un cazo.

Cicerón en su libro la Naturaleza de los dioses 3, 17, 43, hace mención a los cuencos ya utilizados en la época de Numa:  "Y es que -una vez que el discurso me ha conducido hasta este tema- voy a enseñarte cómo he aprendido yo mejores cosas referentes al culto a los dioses inmortales (conforme al derecho pontifical y a la costumbre de los mayores...), gracias a esos cuenquecitos que Nurna nos dejó"



Se piensa que la diferencia entre simpuvium y simpulum sería mínima, quizás en la forma. Simpuvium semejaría más un tazón mientras que el simpulum parecería más un tipo de cucharón o cazo.

Quizás uno de los utensilios más conocidos para las libaciones sea la patera, un recipiente plano, parecido a un plato hondo que se llenaba de vino puro como nos dice Ovidio, Metamorfosis, IX, 160: "Inciensos daba y palabras suplicantes a las primeras llamas, y vinos de una pátera vertía en las marmóreas aras”

Sobre su etimología encontramos estas dos citas: 
Varrón, Lingua Latina V, 122: "Además entre las copas estaban las llamadas paterae, que recibieron una denominación así por el hecho de ser muy abiertas (late patent)”

Macrobio, Saturnales, V, 21: “Pero Plauto abandonó el vocablo insólito y en su comedia Anfitrión dice que le regaló una pátera, aunque la forma de uno y otro recipiente es distinta. En efecto, la pátera como bien indica su nombre es plana y ancha “patens”



En un principio era sin asas ni mango y solía estar hecha de arcilla, aunque con el tiempo fue adquiriendo una forma más trabajada con un soporte para cogerla, adornos y pasa a ser de bronce, plata e incluso de oro con incrustraciones. Así lo leemos en Virgilio, Eneida, I, 729: "En este punto pide la reina la pesada copa (patera) de oro y piedras preciosas, que, usada ya por Belo, fue de todos sus regios descendientes. La hace llenar de vino puro”

 Cicerón, Naturaleza de los dioses, 34, también las cita como copas de oro: "Asimismo, carecía de toda clase de escrúpulos cuando se trataba de llevarse las pequeñas imágenes de oro de la Victoria, y las copas de oro y las coronas que llevaban en sus manos extendidas las estatuas, y solía decir que él no las tomaba sino que las aceptaba"

Plinio, Historia Natural, XXXIII,  54, 12 habla de las pateras hechas de plata: "Fabricio, digo, que no permitiría que ningún general de un ejército tuviera otro plato que una patera y un salero de plata"

Y en los Carmina de Horacio, I, 31 se habla de ella: "¿Qué le reclama a Apolo en su dedicación el poeta inspirado? ¿Qué pide al derramar vino nuevo de la pátera?"


Otro de los objetos utilizados para las libaciones era el ritón, que se caracterizada por tener la forma de un cuerno con la representación de la cabeza de un animal (una cabra, un toro, un caballo, un jabalí, un perro, un ciervo, un cerdo). 
Se supone que su origen estaría en la utilización de los cuernos de los animales para beber tras hacerles un agujero en la parte más estrecha.

En la última entrada comentaremos los objetos empleados directamente para realizar el sacrificio de animal. 

Plurimam salutem! 

domingo, 6 de febrero de 2022

UTENSILIOS DE SACRIFICIO. LVSTRATIO

Durante unas semanas nos vamos a centrar en los utensilios empleados en los sacrificios públicos.  

Antes de llevar a cabo un sacrificio era muy importante que los objetos a utilizar estuvieran puros como bien nos indica Plauto en dos de sus obras, en Anfitrión,  1126: “Entra y di que me preparen enseguida los vasos sagrados para que en ofrenda de numerosas víctimas pida el favor del soberano Júpiter”.

Y en Cautivos, 861:"Pero manda preparar los vasos sagrados para el sacrificio y traer un cordero apropiado y que esté gordo”

 Además del altar, se podía hacer uso de una mesa auxiliar llamada mensa anclabris en la que colocar todo lo necesario para el rito: ofrendas, instrumentos e incluso las vísceras (exta) de la víctima. Como vemos en el relieve del sacrificio ofrecido por Marco Aurelio se podía utilizar a modo de altar.


 No obstante hay que recordar que Macrobio, Saturnales, III, 11, 3 comentaba que no era conveniente hacer libaciones en la mensa, utilizándola como altar:

"Y éste vuestro flamen, pontífice y todo ignora tanto qué se inmola como qué se liba, y para que no se equivoque en todas partes con el mismo error sobre la libación, en VIII dijo: en la mesa liban alegres y ruegan a los dioses, cuando no en la mesa, sino en el altar, de acuerdo con la costumbre, debieron realizar la libación».

[4] Pretextato contestó: «Para responderte primero a la segunda pregunta, digo que tú no has preguntado sin razón sobre la libación practicada en la mesa; y habrías aumentado más el tipo de dificultad, si hubieses apuntado más: que Dido también estaba realizando la libación en la mesa: dijo y realizó en la mesa una libación con el licor de honor"

Descubramos estos utensilios de la mano de las fuentes clásicas.

Comenzaremos por los UTENSILIOS SAGRADOS PARA LA LVSTRATIO O PURIFICACIÓN necesaria para ganarse la voluntad de los dioses y realizada por la persona capacitada y especialista. 

Para purificar se hacía uso de dos elementos básicos: el agua y el fuego.

Con respecto al agua lustral (aquae) debía de proceder de alguna fuente considerada pura o de algún riachuelo, Ovidio, Fasti, II, 45: "¡Ah, demasiado cómodos los que creéis que los tristes crímenes de homicidio pueden lavarse en el agua de un río!”.  A veces podía contener sal.



Se colocaba en las puertas de los templos para purificar las manos, al igual que hoy en día en la entrada a las iglesias. 

El vaso contenedor de agua lustral se llamaba labrum o labellum, por el borde que la caracterizaba, parecido al labio: los labios derivan su nombre de lambere (lamer), al superior le llamamos labium y al inferior, por ser más grueso, labrum(Isidoro, XI, 1, 50). Podía estar hecho de diferentes materiales como arcilla, madera,...

 Para la purificación también se podía emplear un tipo de aspersor (aspergillum) que solía ser una rama de laurel u olivo para la ablución de los asistentes y las víctimas. 

En dos fragmentos de los Fasti de Ovidio hace mención a las ramas de laurel que tenían por si solas un valor lustral:  “El laurel mojado me ha salpicado de agua” (IV, 728)


  “Humedece con el agua una rama de laurel y con el laurel mojado salpica todas las mercancías que pronto han de tener otros dueños. Él también se moja el pelo con el laurel chorreando y pronuncia una plegaria con su voz acostumbrada a engañar: “lava los perjurios del tiempo pasado” (V, 677-679)

 También podemos leer en Juvenal, Sátiras. II, 158, una referencia a las ramas de laurel: Desearían purificarse si les dieran un poco de azufre y antorchas y si hubiera laurel húmedo

Sabemos por Virgilio, Eneida, VI, 230 que también se empleaba el olivo y que se debía esparcir tres veces sobre los presentes, principalmente en ceremonias funerarias: "y recorriendo la asistencia esparce con un gajo de olivo tres veces sobre ella agua lustral en leves gotas”

 

Sin embargo, en algunas monedas se puede apreciar un instrumento especial parecido a una escobilla, distintivo de los pontífices y las Vestales, así nos lo ha transmitido Tácito, en sus Historias, 4, 53: “Los soldados, que llevaban nombres con buen augurio, entraron  en el recinto sagrado con ramas. A continuación, las vírgenes Vestales, con niños y niñas, cuyos padres y madres aún estaban vivos, salpicaban todo el espacio con agua extraída de las fuentes y los ríos”

Al igual que el vaso lustral, también encontramos en el mundo religioso actual el aspersorium.

Otro elemento utilizado en la purificación era el fuego sagrado (foculus), sobre un trípode, que limpiaba como nos dice Ovidio y servía para quemar las vísceras de los animales sacrificados,  Fasti, IV, 785: "todo los purifica el fuego devastador”.


En la lustratio el fuego se empleaba a través de la quema de incienso, resinas, azufre, mirra, etc. en sahumerios (suffimenta), en braseros o en antorchas (taedae), utilizadas también para encender el fuego sagrado. El uso de estas resinas se debía a su poder curativo y purificador.

 En Ovidio, Fasti, II, 561 leemos el uso de las antorchas:que la tea de pino aguarde días puros. Guarda tus antorchas, Himeneo, y retíralas de los negros fuegos. Los llorados sepulcros disponen de otras antorchas.”

 A su vez, el fuego purificaba a los animales y a las ofrendas, por lo que sus cenizas constituían un sistema de lustración.

 Hemos comentado que era frecuente la quema de incienso o resinas que se guardaban en un cofre denominado acerra que durante el sacrificio permanecía abierto y era portado por el camillus en la mano izquierda.


 Las citas sobre el uso de incienso son muy usuales, así leemos en varias obras de Suetonio, Tiberio, VI: mas no tomó otra cosa que un poco de incienso, porque usaba de él para los sacrificios públicos, y con esto se retiró”

 Suetonio, Galba, 8:Al llegar a esta provincia sucedía que estando sacrificando en un templo, a un niño que tenía el incienso se le blanquearon de pronto los cabellos, este prodigio fue interpretado como presagio de un gran cambio, en el que se vería a un anciano suceder a un joven, es decir Galba a Nerón. Poco después cayó un rayo en un lago en el país de los cántabros, encontrándose luego en él doce hachas, signo manifiesto del poder soberano”

Suetonio, Tiberio Nerón, 44: "Se afirma también que cierto día, durante un sacrificio, enamorado de la belleza del que llevaba el incienso, apenas esperó a que terminase la ceremonia para satisfacer secretamente su nefanda pasión”

 También Ovidio, Fasti. IV, 933 al describir la festividad de los Robigalia comenta el empleo de “un mantel desflecado y una tinaja de vino y un incensario. El incienso y el vino y las tiras del añojo y las entrañas repulsivas”

 Ovidio, Pont. II, 1: como insignia esclarecida, ofreció el incienso en las santas aras”

 Ovidio, Pont. III: Recuerda bien que esto era lo primero que solías demandar a los dioses cuando quemabas los granos del incienso en sus altares”.

 Ovidio, Pont. III, 1: Pero antes enciende el fuego en los sacros altares, y ofrece incienso y vino puro a los grandes dioses”

 Ovidio, Pont. III, 3: En todas las aras de la ciudad se quema el odorífero incienso

 Ovidio, Pont. IV, 8:Entonces quemaré el solemne incienso en las rápidas llamas y daré testimonio del poderío de tus dioses”

 Horacio, Od. III, 8, 2: “En las calendas de marzo qué quieren decir estas flores, este  cofre lleno de incienso”

 Persio, Sat. II, 5: En cambio, una buena parte de los grandes señores hará su ofrenda con incensario sigiloso”

Con el fin de encender el fuego sagrado y el incienso se empleaba el carbón o madera, todas salvo la procedente del roble ya que se extingue con rapidez según nos indica Plinio, HN, XVI, 8, 24:  "Sin embargo, la peor especie de todas, tanto para madera como para hacer carbón, es el roble conocido como "halifloeo", cuya corteza es notablemente gruesa, y el tronco de tamaño considerable, pero en su mayor parte hueco y esponjoso: es el único de esta especie que se pudre mientras el árbol aún está vivo. Además de esto, es muy frecuente que le caiga un rayo, aunque no tiene una altura tan notable, por lo que no se considera lícito emplear su madera para los sacrificios"

Como hemos mencionado, se hacía uso de un trípode para quemar los sacrificios, tanto cruentos como incruentos.


Para purificar las manos los camillii llevaban en su hombro izquierdo una especie de toalla de lino, mantele, con flecos e incluso, con algún tipo de decoración como una franja púrpura que recuerda a la sangre purificadora.  Ovidio, Fasti. IV, 933: “un mantel desflecado y una tinaja de vino y un incensario

De nuevo, recordamos la existencia de paños de lino en los altares de las iglesias actuales.

 Comentar que hay más elementos que se utilizaban como purificadores, como por ejemplo, el viento, de ahí el uso de los oscilla o los aiora que se balanceaban con el aire: Servio, Ad Georg. 2, 389: Así la lustratio se hace bien por agua, por fuego o por aire a través de los oscilla”.

 También la sangre de los animales expiaba a una persona al tocarla: Suetonio, Calígula. LVI: “Durante un sacrificio fue rociado con la sangre de un flamenco

En otra entrada hablaremos de otros utensilios muy interesantes.

Plurimam salutem!