En esta ocasión nos vamos a centrar en dos platos hermosamente decorados
con una escena de picnic.
Pese a que vamos a comentar dos platos, es importante tener presente que
son varios los mosaicos que nos muestran comensales reclinados bajo un toldo en
el campo, como por ejemplo, el mosaico de la villa de Tellaro.
Centrándonos en los platos comencemos por la pieza de plata perteneciente
al tesoro de SEVSO, del imperio
romano tardío. Se trata de una colección de utensilios de plata destinados a
ser usados en el banquete y que muestra perfectamente la riqueza de sus
propietarios.
El tesoro salió a la luz en los años 90. Su hallazgo levantó el debate, e
incluso, pleitos por su propiedad.
Son catorce piezas de plata que se encontraron enterradas en el interior
de un caldero de cobre: cuatros platos grandes,
cinco jarras, dos cubos, un cuenco, un ánfora y un cofre para objetos de tocador.
Su procedencia e historia todavía siguen investigándose. Se cree que
quizás fueran fabricadas en diferentes lugares del Imperio y su datación estaría
entre el 350 y el 450 d.C.
Por lo que respecta al nombre se llama “el Tesoro de Seuso” por un plato que tiene una escena de caza. Esta pieza que va a ser
nuestro protagonista, fue fechada a mediados o finales del s. IV y se
caracteriza por una inscripción con una guirnalda alrededor del medallón
central con la escena campestre que dice:
Hec Sevso tibi durent per saecula multa
Posteris ut prosint vascula digna tuis
“Que estos, oh Seuso, sean tuyos por muchos siglos
Pequeños vasos aptos para servir dignamente a tu descendencia”
Como curiosidad el crismón que aparece al principio de la inscripción que estaría vinculado al cristianismo, sin que eso indique que su propietario, Seuso, un hombre acaudalado y de origen germano, fuera cristiano.
Se piensa que quizás este plato fuera fruto de un regalo, ¿de boda?, no
se sabe con certeza pues no pone el nombre del donante que suele ser lo normal.
Esta pieza presenta un motivo central con esa escena de picnic como hemos
comentado.
En ella se puede distinguir dos partes:
En la parte de arriba, en un bosque, se aprecian unos cazadores a caballo
que persiguen unos ciervos.
En la parte inferior, se ve un pescador con una caña y una red, pescando
en un río repleto de pescados. A su vez, se repite la temática de la parte
superior con la persecución por parte de un cazador, en esta ocasión a pie y
acompañado de un perro, de unos ciervos y un jabalí.
En la parte central, se ve una maravillosa escena de banquete al aire
libre, un escenario bucólico, bajo un toldo sujeto a dos árboles, a los que se
les han atado dos caballos.
Bajo el velarium, encontramos cinco
figuras reclinadas en un stibadium, cuatro hombres y una mujer. Todos alrededor
de una pequeña mesa, en la que se puede apreciar un plato con un pescado.
Llama a la atención que en una escena de picnic aparezca una mujer, la interpretación
que se hace es que sea la esposa de Seuso disfrutando con su esposo de todas
sus propiedades.
A su alrededor, hay cinco esclavos, los dos centrales sirven uno comida y
otro bebida. A su alrededor podemos ver diferentes de utensilios de banquete
(una patera, una jarra, …).
A la derecha encontramos, dos siervos más, uno cortando y preparando la
elaboración de un ciervo. Otro, un poco más arriba, calentando un caldero.
A la izquierda, hay otro siervo, preparando el asado de un jabalí,
mientras a su lado, un perro de caza está esperando su recompensa.
Otro plato, en este caso dorado, procede de Cesena en el norte de Italia y es de mediados del s IV. De nuevo,
encontramos otro motivo central con una escena de picnic.
En la pieza se pueden distinguir tres partes:
En la parte superior, se puede ver a cinco comensales que están
recostados alrededor de una mesa circular que tiene un bonito mantel. Sobre
ella se aprecia un plato con un animal, quizás un jabalí, un lirón o un cerdo.
A la izquierda se distingue un sirviente que está llevando a cabo una lustratio, vierte agua en las manos de
los comensales para purificarlas.
A la derecha se ve a otro sirviente que sirve una copa de vino.
Al igual que el plato de Seuso, el ambiente que se representa es el de un
banquete campestre, con árboles y un
toldo sujeto en los árboles que protege a los comensales.
En la parte inferior vemos un mozo de cuadra o un corredor con un caballo
que está ataviado con una doble cadena en el cuello y en su vientre. Parece que
han salido de un edificio que está junto a ellos. Podemos pensar que se trata
de una villa con una torre y un ábside.
Debajo podemos ver cuatro patos y un estanque con agua.
Podemos concluir que ambos platos representan un picnic al aire libre, en
ambos casos, cinco comensales se reclinan bajo un toldo para descansar y
disfrutar de un agradable banquete.
Este tipo de escenas campestres con cazadores se encuentran bien
atestiguadas en las fuentes clásicas escritas y un buen ejemplo lo encontramos
en Filostrato el joven, que en su libro Imagenes, 3 nos describe
perfectamente un cuadro con una escena de picnic con cinco cazadores que nos
recuerdan bastante al plato de Seuso:
“El
grupo de cazadores, encantadores jóvenes
robustos que todavía respiran la emoción de la cacería, ahora …, están
descansando. ¡Dioses! ¡Cuán maravillosa y encantadora es la claridad
del arte del pintor, y cuán bien podemos discernir la historia de cada uno! Este
triclinio improvisado, hecho de redes, creo que recibe a quienes podríamos
llamar "los líderes de la caza". Son cinco en número. Ves a
uno de ellos, que… según me parece, está
contando la historia de su concurso y cómo fue el primero en derribar a uno de
las dos bestias salvajes que están suspendidas de los árboles en redes,
aparentemente un ciervo y un jabalí. … Los demás lo miran atentamente
mientras cuenta su historia; y el segundo de ellos mientras se recuesta en
el triclinio parece estar descansando un rato y planeando pronto describir
alguna hazaña propia en la caza. En cuanto …al hombre al lado de la figura
central, con una copa medio llena en una mano y balanceando su mano derecha
sobre su cabeza, me parece estar cantando las alabanzas de Artemis, mientras su
vecino mira hacia el sirviente, le está ordenando que apure la copa…..Uno de
los dos perros, tendido frente a él, está comiendo, mientras que el otro se
pone en cuclillas sobre sus patas traseras y estira su cuello para atrapar los
bocados que le arrojan. Un segundo hombre enciende un fuego, y al poner
sobre él algunas de las ollas adaptadas para este uso, prepara a los cazadores
la abundante comida, apresurándose en su tarea; … de los otros dos
sirvientes, uno, nos dice que está cortando porciones con el debido
cuidado para que sean iguales, y el otro extiende la fuente que va a recibir la
carne, sin duda exige que las porciones sean iguales”
2 comentarios:
Un blog muy bueno el tuyo, mezclas muy bien historia y cocina.
Muchas gracias por el comentario
Un saludo
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