domingo, 14 de octubre de 2012

DODRA, UNA SALSA ROMANA





En la antigua Roma existió una salsa poco conocida llamada dodra, de la que tenemos constancia gracias al autor latino Ausonio que en sus Epigramas, 19, 20 y 21 nos transmitió su receta.

Antes de conocer los componentes que la constituyen veamos el por qué de su nombre. 

La palabra dodra procede del término dodrans que era una moneda que correspondía a la novena parte (9/12) de un as romano. 
Dodrans era la contracción de *de-(qua)drans. Así pues, la salsa tomó su nombre por los nueve ingredientes que lo formaban.




Ausonio nos legó en tres poemas que hacían referencia a esos nueve componentes como origen de su denominación: 

“La «dodra» se hace con un «dodrante». Ponlo así: caldo, agua, vino, sal, aceite, pan, miel, pimienta, hierba: nueve”. (Ausonio, Epigramas, 19)

“«Me llamo dodra». ¿Por qué? «Llevo nueve ingredientes». ¿Cuáles son? «Caldo, algua, miel, vino, pan, pimienta, hierba, aceite, sal»”. (Ausonio, Epigramas, 20)

“Yo, «dodra», que soy bebida y número, tengo miel, vino, aceite, pan, sal, hierba, caldo, agua, pimienta”. (Ausonio, Epigramas, 21)

En las tres recetas se repiten sus nueve componentes que alfabéticamente eran los siguientes: aceite, agua, caldo, hierba, miel, pan, pimienta,  sal y vino.

Esta salsa ser tomada como si fuera una crema o simplemente como un caldo más espeso.

Veamos una posible adaptación de la receta:

INGREDIENTES:

  •   Cuatro cucharadas de aceite de oliva 
  •     Agua para el caldo
  •      100 ml de caldo de verduras (por ejemplo, apio, judías, col, nabo, zanahoria,…
  •     Una pizca de orégano, perejil, tomillo y comino
  •      Dos rebanadas de pan
  •      1 cucharada de miel
  •     Una pizca de pimienta
  •      Una pizca de sal
  •     1 vaso de vino blanco
ELABORACIÓN:

  •   CALDO, a modo de bebida: Hacer un caldo de verduras y colar bien. Añadir al caldo las hierbas picadas. Mientras tanto poner las rebanadas de pan en remojo con el vino blanco. Añadirlas al caldo para espesarlo. Batir bien y servir condimentando con sal, pimienta, aceite y miel.   
                                                                                         
  • CREMA: Cocer las verduras frescas con un poco de agua y sal.  Añadir a la cocción las hierbas picadas. Mientras tanto poner las rebanadas de pan en remojo con el vino blanco. Añadirlas a las verduras ya cocidas. Batir bien y servir condimentando con sal, pimienta, aceite y miel.
 

Prosit!

Plurimam salutem!

Dibujo moneda extraído de esta página

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Es un placer leer tus nuevos artículos y repasar los anteriores, como siempre interesantes y didácticos.
Un saludo

Emilio

Charo Marco dijo...

Emilio, el honor es mío. Tener un lector como tú me colma de satisfacción.

Gracias

Saludos

Viena dijo...

Me sale el chiste fácil, Charo y diría que los antiguos ponían miel hasta en la sopa, nunca mejor dicho. Se me hace difícil imaginar el sabor y eso que últimamente estoy usando la miel en cocina salada más que nunca. Es un toque que no había descubierto hasta hace unos meses, pero qué bien le sienta a los platos.
Un placer como siempre.
Un beso.

Charo Marco dijo...

Estimada Viena, tienes mucha razón hasta en la sopa.

Ciertamente, yo no la había probado nunca y tiene un sabor agradable, con un toque dulzón y especiado.

Gracias por tu comentario

Un besito