domingo, 1 de marzo de 2009

CISNES. PRIMERA PARTE

Al ver un blanco cisne, pocas veces nos imaginamos que una especie tan hermosa pueda ser servida como plato principal, pero si acudimos a las fuentes, esta romántica teoría se nos derrumba, pues sabemos según nos narra Ateneo, IX 393 y ss que no faltaban en los banquetes de alta categoría:
“Pero no solían faltar en nuestro banquete los cisnes



También Eliano, Hª de animales, XIV, 13 habla del consumo de sus huevos entre los alimentos que formaban parte de la dieta:
“El monarca, de acuerdo con lo que refieren las narraciones indias, se complace en comer muchísimo [...] la dieta del monarca también incluye huevos de cisne, de avestruz y de ganso. No me parece mal que coma esos otros platos, pero, mis amable indios, no apruebo que agreda a los polluelos o consuma huevos de cisne, que son aves dedicadas a Apolo, y como dice la fama que todo lo propala, las que entre todas poseen el más melodioso de los cantos

Ateneo en la cita anteriormente mencionada, nos cuenta qué pensaba Aristóteles con respecto a estas aves palmípedas, belicosas y que se alimentan de hierbas: “[…] cisnes, sobre los que Aristóteles dice:”El cisne es prolífico y belicoso; así mata a sus congéneres el que es combativo. Lucha incluso contra el águila, aunque no sea ésta la que inicie la pelea. Son canoros, especialmente cuando se acercan a su fin, pero también cuando cruzan el mar cantan. Pertenecen al grupo de las aves palmípedas y comedoras de hierba

Con el naturalista romano Plinio podemos ampliar nuestro conocimiento de estas aves además de descubrir su curiosa forma de emigrar:
“De forma similar emigran las ocas y los cisnes, pero su vuelo se distingue. Se desplazan en una formación en punta, para cortar el aire más fácilmente que se avanzaran de frente; por detrás a medida que la cuña se va desplegando, la formación se extiende y se ofrece en toda su amplitud al viento que la impulsa. Colocan el cuello sobre el del que les precede; cuando los guías están cansados los reciben en la retaguardia."

Eliano, XVII, 24 nos comenta dónde habitan y en qué destacan:
“El cisne vive en lagunas, pantanos y ríos de caudal constante que fluyen con ritmo apacible. Son aves tranquilas que llegan a vivir muchos años y no padecen los inconvenientes de la vejez. Su fuerza es tan grande que los hace muy confiados, aunque nunca llegan al extremo de agredir si motivo, sino que se defienden de sus atacantes. Les toca la mejor parte cuando un águila se atreve a arrojarse sobre ellos”

Sabemos por las fuentes que se servían sus huevos y su carne que engordaban en lugares oscuros para facilitar su engorde. Al tratarse de una carne poco gustosa se solían servir sus polluelos o en el caso de ser los adultos, era acompañada de un gran número de especias que le otorgaban sabor. Sus plumas se utilizaban para elaborar un instrumento para la caza de animales salvajes:
“[para cazar osos] por la izquierda tienden una retorcida y larga cuerda de lino […] de ella penden cintas de muchos colores, variadas y brillantes, alarma para las bestias salvajes; y de ella cuelgan incontables y brillantes plumas, las bellas alas de las aves del aire, de buitres, de blancos cisnes y zancudas cigüeñas Opiano, De la caza , IV, 392.

Una de las creencias más escuchadas sobre estas aves es “el famoso canto del cisne”, que emiten momentos antes de su deceso. Esta afirmación no es aceptada por todos los autores del mundo clásico y en su favor o en su contra podemos leer citas como:
“Alejandro de Mindo afirma que pese a haber seguido de cerca a muchos de ellos en trance de muerte, no los oyó cantar”, Ateneo, IX 393 y ss.

“Aristóteles refiere que, en una oportunidad, en el mar de Libia, se observó la presencia de una bandada de cisnes, de la que nació un canto, similar al de un coro de voces bien afinadas, muy suave, pero tan melancólico que inspiraba compasión en quien lo oyera; también cuenta que cuando terminó el canto, algunos cisnes quedaron allí muertos.
Al parecer el cisne prefiere habitar en fuentes, lagos y lagunas, es decir, en cualquier sitio en que abunde el agua. Quienes saben de estas cosas afirman que en esos lugares los cisnes ensayan su canto”
, Eliano, X, 36

[...] A la muerte de los cisnes, según cuentan, se escucha un canto lastimero; En mi opinión, después de realizar algunas comprobaciones, es falso. Estos animales se comen unos a otros.” Plinio, HN X, 63

Este canto era considerado premonitorio, un arte adivinatoria. En este sentido afirma Platón, Fedón, 84, e:
“Además, según parece, os da la impresión de que en mi arte adivinatoria soy inferior a los cisnes, que en cuanto perciben que han de morir, aun cantando ya en su vida anterior, entonces entonan sus más intensos y bellos cantos, de contentos que están a punto de marcharse hacia el dios que son servidores. […] sin embargo, a mi no me parece que ellos canten al apenarse, ni tampoco los cisnes, sino que antes, como son de Apolo, son adivinos y, como conocen de antemano las venturas del Hades, cantan y se regocijan mucho más en ese día que en todo el tiempo pasado. Con que yo también me tengo por compañero de esclavitud de los cisnes y consagrado al mismo dios, y en no peor manera que ellos poseo el don de la adivinación que procede de mi dueño, así que tampoco estoy más desanimado que éstos al dejar la vida

En el s. V d.C en Horapolo, Hieroglyphica, encontramos de nuevo la leyenda del canto del cisne, pero con un nuevo enfoque, ya que no habla del canto antes de morir, sino del canto cuando envejecen: “El músico viejo entendían por el Cisne, que según dicen de él, canta más suavemente cuanto más se llega a la vejez, de quien se finge cuando fue criado por Apolo

Esta semana nos hemos centrado en las características de los cisnes y su canto. La semana próxima hablaremos de la vinculación de estas aves con los dioses y su iconografía.


Plurimam salutem!
*Imágenes propias

6 comentarios:

El llano Galvín dijo...

Me ha gustado muchísimo tu post, sobre todo lo relacionado con su canto. Enhorabuena!!!

Charo Marco dijo...

Gracias por tu comentario. Como siempre, puntual a tu cita; con lectores como tú, da gusto investigar.

Gracias de nuevo
Saludos

Anónimo dijo...

Tienes un pequeño premio en mi blog http://traslashuellasdelosdioses.blogspot.com
Besotes!

Charo Marco dijo...

Hola M@riel, eres muy amable por tu premio,
Gracias por pensar en De Re Coquinaria.
Saludos

Anónimo dijo...

Qué interesante, Charo, como siempre.
Un beso
Elena

Charo Marco dijo...

Elena, eres muy amable.
Gracias por tu comentario.
Un abrazo