En el mundo militar
una de las mayores recompensas para un general vencedor era la celebración del TRIUMPHUS.
Se trataba de la
entrada en Roma de un general como recompensa por su victoria ante el enemigo,
siguiendo un ritual establecido. La procesión triunfal recorría las calles
hasta el templo de Júpiter Óptimo Máximo.
Los requisitos para poder
celebrar un triunfo eran los siguientes:
a)
Ser magistrado en funciones,
b)
Ser general en jefe cuanto tuvo lugar la
victoria,
c)
De las magistraturas excepcionales sólo
al dictador,
d)
Había que celebrarlo en persona,
e)
Que la guerra fuera considerada ‘justa’,
es decir, ni entre romanos ni contra esclavos,
f)
Matar unos 5000 enemigos en el combate.
ESQUEMA CELEBRACIÓN TRIUNFO. TALLER MILITARIA SAGUNTO |
Sabemos que tras la celebración del triumphus
se llevaban a cabo dos banquetes, uno para
magistrados y senadores por un lado, y para el pueblo y los soldados por otro.
No
obstante, Dión Casio 55, 2, 4, además de comentar los diferentes banquetes que
se realizaban, habla de la celebración de una cena para las mujeres:”Tiberio, Druso, mientras aún vivía, … había celebrado el
triunfo ecuestre, y se había festejado el pueblo, algunos en el Capitolio y el resto en otros muchos lugares. Al
mismo tiempo Livia, también, con Julia, había
dado una cena a las mujeres”
Dión
Casio, 55, 8, 2 hace referencia de nuevo a la cena para las mujeres:”Tiberio… celebró su triunfo,… dio un banquete al Senado en el Capitolio, y dio uno a cuenta de las mujeres en algún lugar u
otro”
CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LOS BANQUETES
Antes de
ver las características generales intentemos comprender el por
qué y la justificación de estos grandes convites.
Polibio,
XXX, 14 nos da una pista: mostrar perfectamente el talante del general coronado y así nos lo transmite: ”Es
propio de un mismo ánimo organizar magníficamente
los juegos, dar banquetes, ofrecer bebidas con
esplendidez y ordenar hábilmente las tropas contra el enemigo”
Estos
banquetes se festejaban tras la Pompa
triunfal, según indica Dionisio de Halicarnaso, Hª Antigua de Roma 5, 17, 2: “acabada
la procesión, dio un festín a los más distinguidos ciudadanos”
A
su vez, destacaban por
su grandiosidad, Marcial, 8, 49, 7:” Tan grandioso como se recuerda el banquete del triunfo de los Gigantes y
tan grandiosa como fue para todos los dioses aquella noche, en la que el buen
Padre se puso a la mesa con el común de los dioses y a los Faunos se les
permitió pedir vino a Júpiter, así de
grandes son, César, los convites que celebran tus laureles: nuestra alegría
regocija a los propios dioses. Comen
contigo todos los caballeros, el pueblo y los padres y toma Roma manjares de
ambrosía junto con su caudillo. Habiendo prometido cosas grandes, ¡cuánto
mayores nos las has dado! Se nos prometió una espórtula; se nos ha dado un banquete en toda regla”
Por lo copiosos que eran estos banquetes, sabemos
que para los agricultores este tipo de
celebraciones eran muy beneficiosas para sus bolsillos, como bien nos lo
dice Varrón RR, 3, 2, 16: “Sesenta”, respondo. “Pero para que llegues a esta ganancia te es necesario
o un banquete público o el triunfo de
alguien, como entonces fue el de Metelo Escipión, o las cenas de
asociaciones que, siendo ahora innumerables, encarecen los artículos del mercado.
En todos los demás años, si bien no puedes esperar esta suma, espero que el aviario
no te arruine; y, para que no te defraudes, con las costumbres actuales esto no
sucederá más que rara vez, pues ¿cuál es
el año en que no ves un banquete público o un triunfo, o a las asociaciones no
organizar festines?”. “Pero a causa del lujo”, dijo Merula, “en cierta
manera hay un banquete diario dentro de las puertas de Roma”
Y lo
mismo en RR, 3, 5, 8 “Si reunieras cinco mil en
el aviario”, le dice Apio a Axio, “y hubiera un banquete o un triunfo, podrás poner al momento a buen interés los
sesenta mil sestercios que quieres”.
Podían duraba toda la noche e incluso días según nos narra Plutarco, Sila, 35, 1: “Consagró Sila a Hércules
el diezmo de toda su hacienda, y daba al
pueblo banquetes sumamente costosos, siendo tan excesivas las prevenciones,
que todos los días se arrojaba al río gran cantidad de manjares, y se bebía
vino de cuarenta años, y más añejo todavía. En medio de uno de estos convites, que prolongó por varios días,
murió de enfermedad Metela,…”
Su
financiación podía correr a cargo del erario público o según
leemos en Ateneo IV,
153 c lo sufragaba el general triunfador: “En la ciudad de Roma, cuando se celebra un
banquete en el templo de Heracles, es el
general que a la sazón festeja su triunfo quien lo ofrece y los preparativos
del festín son dignos de Heracles”
Parece
ser que estos festejos se realizaban en
un templo, Apiano,
Sobre África, 66 nos lo
confirma: “Cuando llegó Escipión al Capitolio, finalizó la procesión, e
invito a un banquete a sus amigos en el templo como era la costumbre”
Según nos ha transmitido Ateneo, V, 221 f podía
ser en el de Hércules: “En el templo de
Heracles, donde los generales que obtienen el triunfo agasajan a los ciudadanos como nos han
relatado muchos poetas e historiadores nacionales”
Según
Tito Livio, 45, 3, 13 en el del
Capitolio. A su vez se pregunta el por qué de esta costumbre:” ¿Y qué decir
del banquete del senado que no se celebra ni en una propiedad particular ni en
un terreno público sin consagrar, sino en
el Capitolio? ¿Se realizan estos
actos para complacer a los mortales o para honrar a los dioses?”
No obstante, seguramente también se celebrarían en
el Foro pues era frecuente su empleo para banquetes públicos al aire libre.
En esta ocasión nos hemos centrado en las peculiaridades de la ceremonia del triunfo y en los dos tipos de banquetes que se realizaban.
La semana próxima hablaremos de cada uno de los banquetes.
Plurimam salutem!
*Imagen del relieve extraída de esta página
2 comentarios:
He disfrutado de manera especial con esta lectura. También se puede constatar como se cumplía esa ley de la oferta y la demanda con el aumento de precios a causa de las fiestas y celebraciones, como bien sabemos sobre todo cuando se acercan las fiestas navideñas. Realmente no hay nada nuevo bajo el sol.
Abrazos
Emilio
Estimado Emilio, gracias por tus amables palabras. Me alegra que te haya gustado.
Ciertamente, nada nuevo bajo el sol.
Un abrazo
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