Con el apelativo de ACETABVLVM
encontramos entre los utensilios de mesa en los banquetes romanos un recipiente
que, como bien dice su nombre, servía principalmente para contener acetum,
es decir, vinagre.
Isidoro, XX, 4, 12 nos comenta su etimología: “Acitabulum (vinagrera) viene a equivaler a acetaforum,
porque contiene el vinagre (acetum ferre)”
También
lo encontramos con su nomenclatura griega de OXYBAFHON del griego ὀξίς, como
bien se puede leer en Ateneo, 494, c y e que además de darle el uso de contenedor
de vinagre, habla de su empleo como vaso
pequeño como consecuencia de su frecuencia en las mesas:
“Oxybaphon (vinagrera): en el uso corriente se llama así al recipiente para el vinagre, pero es también el nombre de un vaso que menciona Cratino en El Botellón: “¿Cómo, pero cómo, se lo podría hacer dejar la botella, el exceso de bebida?...Ya no poseerá ni una vinagrera para meter vino”
“Oxybaphon (vinagrera): en el uso corriente se llama así al recipiente para el vinagre, pero es también el nombre de un vaso que menciona Cratino en El Botellón: “¿Cómo, pero cómo, se lo podría hacer dejar la botella, el exceso de bebida?...Ya no poseerá ni una vinagrera para meter vino”
Que la vinagrera es un tipo de copa
pequeña de cerámica lo deja claro Antífanes en la Iniciada, en los versos que
siguen. Se trata de una vieja borrachina que ensalza una copa de gran tamaño y
desdeña la vinagrera por pequeña…En efecto, donde estábamos hace poco, bebíamos de vinagreritas de arcilla”…
En los Babilonios de Aristófanes entendemos
que la vinagrera es un vaso en el episodio en el que Dioniso dice de los
demagogos atenienses que le reclamaban dos vinagreras cuando se presentó ante
el tribunal a defender su causa. En efecto, no se puede interpretar otra cosa, sino que lo que le reclamaban eran
vasos para beber. Tampoco la vinagrera que se les pone a los jugadores de
cótabo, contra la que lanzan los posos, podría ser más que un vaso ancho y
abierto. Pero también menciona la vinagrera como un vaso Eubulo en la Molinera:
“Y beber aparte…una vinagrera en común. Luego objetó bajo juramento el vino que
él era vinagre legítimo, mientras que el vinagre afirmaba que él era más vino
que el otro”
En Quintiliano, VIII, 6 encontramos el uso de acetabulum para cualquier copa de boca ancha: “Porque a la manera que los vasos de boca angosta (acetabula) no reciben nada del licor que se les envía de golpe, pero se llenan cuando se les echa poco a poco y gota a gota, así se ha de tener cuenta con lo que puede el talento de los niños. Porque si son cosas que exceden su capacidad, no aprenderán nada, como que no alcanzan a tanto”
E incluso encontramos en Isidoro, III, 21, 11 el empleo de esta palabra para definir a los címbalos: “Cymbala acitabula quaedam sunt, quae percussa invicem se tangunt et faciunt sonum”
Con respecto a su forma, por los restos que han
quedado como ofrenda en las tumbas, se sabe que se trataba de un recipiente pequeño,
de ahí en sufijo- bulum, de boca ancha y no muy alto, hecho
mayoritariamente de barro, pero también de vidrio, bronce, plato e incluso,
oro.
El uso tan extendido del vinagre para
condimentar y conservar los alimentos hacía que en la mesa de los banquetes se
encontrara siempre esta pieza de menaje.
Se sabe que el término acetabula se daba también a los cubiletes utilizados por los circulatores o praestigiatores, como podemos ver en la Epístola,
45 de Séneca:
“…Estos sofismas nos engañan inocuamente, al igual que los cubiletes y las piedrecitas de los prestidigitadores, cuya personal astucia es la que me divierte. Hazme comprender cómo se urde el engaño; se acabó la diversión”
“…Estos sofismas nos engañan inocuamente, al igual que los cubiletes y las piedrecitas de los prestidigitadores, cuya personal astucia es la que me divierte. Hazme comprender cómo se urde el engaño; se acabó la diversión”
También
es una medida de capacidad para líquidos, Isidoro, XVI, 26, 5 nos la menciona:
“El acitabulum es la cuarta parte de una hemina, con un valor de doce dracmas…por su parte una hemina equivale a una libra”
“El acitabulum es la cuarta parte de una hemina, con un valor de doce dracmas…por su parte una hemina equivale a una libra”
Plinio
XXI, 34, 185: “Cuando se habla de la medida de un
acetábulo, es lo mismo que una cuarta
parte de una hemina, o quince dracmas de peso”
Para terminar, comentar que en anatomía podemos encontrar una articulación en la pelvis que recibe el nombre de acetábulo por la forma que presenta.
En los escritos quirúrgicos de Hipócrates, Vectiarius, 1 habla del mismo: “el fémur se dobla hacia afuera y adelante; su cabeza es una epífisis redonda que da origen al ligamento insertado en el acetábulo de la articulación de la cadera. Este hueso se articula un tanto oblicuamente, pero menos que el húmero”
En los escritos quirúrgicos de Hipócrates, Vectiarius, 1 habla del mismo: “el fémur se dobla hacia afuera y adelante; su cabeza es una epífisis redonda que da origen al ligamento insertado en el acetábulo de la articulación de la cadera. Este hueso se articula un tanto oblicuamente, pero menos que el húmero”
*Imágenes extraídas de Wikipedia (acetabulo), Lacus Curtius y del slideShare
Plurimam salutem!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario