domingo, 29 de abril de 2007

LUDI SAGUNTINI 2007- TALLER DE COCINA ROMANA ANTIGUA



Tras una semana, los LUDI SAGUNTINI 2007 llegan a su fin y con ellos, el Taller de Cocina Romana antigua. Se cierran unas jornadas de compartir y de difundir la cultura clásica.
Muchos han sido los visitantes a la exposición y al taller que con su interés y atención han estimulado los ánimos para futuros proyectos.

También han sido muchos los que no han podido asistir por la lejanía, así pues no nos podemos olvidar de ellos, por lo que os dejamos una muestra de lo que se ha estado "cociendo" en el taller "DE RE COQUINARIA".



Podéis ver las imágenes de todos los talleres llevados a cabo estos días en la página Web, culturaclasica.net.


Gracias a tod@s por vuestro apoyo.

Os esperamos en otras ediciones.

Curate ut valeatis!

domingo, 22 de abril de 2007

LUDI SAGUNTINI- DE RE COQUINARIA

Un año más dan comienzo los LUDI SAGUNTINI.
Desde el lunes 23 de abril hasta el viernes 27 (al mediodía), miles de estudiantes podrán disfrutar, además de diferentes representaciones teatrales, de los Talleres Didácticos de Cultura Clásica de Sagunt.

En esta VII edición contamos con tres talleres nuevos:

Higiene y estética en la Antigua Roma, dirigido por Conxa Pont.

Magia y adivinación, dirigido por Salvador Muñoz y Fernando Lillo.
Olimpomenuts, llevado a cabo por el alumnado y el profesorado del Ciclo Formativo de grado superior de Ed. Infantil, dirigido a niños del segundo ciclo de Infantil.
Los Talleres ya consolidados después de estos años son:

- Epigrafía.
- Indumentaria.
-Mosaicos romanos.
- Ciencia.
- Juegos romanos.
- Tiempo
-Ludoteca mitológica
- Cocina romana antigua
Durante esta semana se hemos estado trabajando para que todo esté a punto para el lunes.

A continuación podéis ver unas imágenes del Taller de Cocina Romana Antigua, origen de este blog.






Gracias a todos por los ánimos y os esperamos

Curate ut valeatis!

sábado, 21 de abril de 2007

VINALIA



El 23 de Abril, ante diem IX Kalendas Maias, era un día festivo para los antiguos romanos. Se celebraban los VINALIA. Consistía en una fiesta vinculada a la viña y en honor a Júpiter, aunque, según nos explica Ovidio en Fasti, IV, 863 y ss, en un principio estaba dedicada a la diosa Venus:
He hablado de Pales y ahora voy a hablar de los Vinalia; pero entre una y otra fiesta hay un día por medio. Muchachas del pueblo, celebrad la divinidad de Venus. Venus es apropiada para los requerimientos de las que tienen muchas profesiones. Ofreced incienso y pedid belleza y el favor popular, pedid palabras amables y convenientes a las bromas, ofreced a la señora la hierbabuena que ella agradece y el arrayán que es lo suyo y cuerdas de junco ocultas en montones de rosas. Ahora es oportuno visitar el templo vecino a la puerta Colina; el nombre lo tiene de la colina siciliana. Cuando Claudio barrió con las armas a la aretúside Siracusa y te conquistó con la guerra a ti, Érice, Venus fue trasladada en virtud de un oráculo de la longeva Sibila, y prefirió que se la venerase en la ciudad de su origen. Así pues, ¿me preguntáis por qué llaman al festival de Venus los Vinalia y por qué motivo pertenece este día a Júpiter? Había guerra por ver quién seria el yerno de la latina Amata, si Eneas o Turno. Turno se atrajo la ayuda de los etruscos. Mecencio era ilustre y, con las armas en las manos, feroz, y, si grande a caballo, a pie era más grande aún; Turno y los rútulos intentaron atraérselo a su partido. Frente a esos intentos, habló de la siguiente manera el caudillo etrusco: «El valor que poseo me ha costado caro; pongo por testigos mis heridas y las armas que tantas veces manché con mi sangre. Tú, que pides mi auxilio, reparte conmigo una recompensa que no es grande: los próximos mostos de tus lagares. El asunto no requiere tardanza alguna: a vosotros os corresponde dar, a nosotros, vencer.
¡Cómo desearía Eneas que yo me hubiera negado a esto!». Los rútulos estuvieron de acuerdo. Mecencio se puso las armas; Eneas se las puso, y habló Júpiter: «El enemigo ha prometido su vendimia al rey tirreno; ¡tú, Júpiter, te llevarás el mosto de la viña del Lacio!». Prevalecieron los votos mejores. El soberbio Mecencio sucumbió y atronó la tierra con su pecho rabioso. Había llegado el otoño, manchado con las uvas prensadas: hicieron entrega del vino debido a Júpiter, su acreedor. Desde entonces el día se llamó de los Vinalia.
Júpiter reclama ese día y disfruta participando en su fiesta.

Esta celebración se llevaba a cabo dos veces al año, el 19 de Agosto, los Vinalia Rustica, y el 23 de Abril, los Vinalia Priora o Urbana.

En los Vinalia Rustica se rogaba a la divinidad por las uvas que comenzaban a madurar y coincidía con el día en el que se iniciaba la vendimia. La fiesta de la vendimia la abría el Flamen Dialis, cuando ante el altar exprimía con sus manos un racimo de uvas.

Los Vinalia Priora cerraban el ciclo vitícola. Se hacían libaciones al dios con el vino de la cosecha anterior, para mostrarle que ya se había terminado el caldo de esta cosecha y era necesario velar por la siguiente, esperando que la divinidad, como dios que proporciona las lluvias y las tormentas, se cuidara de las inclemencias del tiempo y les fuera propicio.


Como punto y final de esta festividad, una breve explicación de las diferentes maneras utilizadas por los antiguos romanos para mejorar el vino:

  • Mezclar con miel, tras echarle harina de cebada o de trigo o harina de legumbres. Esta unión proporcionaba sabor y aroma, además de ser considerada un buen reconstituyente y con uso medicinal.
  • Añadir sólo miel (mulsum). O bien miel y flores (por ejemplo, el vino de rosas o de violetas).
  • Añadir hierbas como tomillo, poleo, canela, azafrán, anís, menta,… Se obtenía un vino muy aromático que no embriagaba en exceso.
  • Mezclar con agua dulce para eliminar la aspereza del vino y aumentar su volumen. La proporción de agua sobrepasaba a la de vino (1ó 2 de vino por 5 ,4 ó 3 partes de agua). Se podía refrescar la mezcla con agua de nieve o agua fría, gracias a unos recipientes con doble cámara en los que se colocaba la nieve sin que entrara en contacto con el vino o también se podía añadir el agua directamente al vino por medio de unas cestas de tela para eliminar las posibles impurezas del agua de nieve.
Como decían los romanos:

"In vino veritas"




Plurimam salutem!

sábado, 14 de abril de 2007

CERALIA - FIESTA DE CERES

Los antiguos romanos celebraban el día 12 de abril, Pridie Idus Apriles, una festividad llamada CERALIA en honor a la diosa Ceres.
La fiesta se prolongaba del 12 al 19 de abril, a
mbos inclusive.
La diosa Ceres, era la divinidad que se cuidaba de la agricultura y, por tanto, simbolizaba la fertilidad de la tierra. Se identificaba con Deméter en el mundo griego.
Durante estos días se conmemoraba el regreso a la tierra de su hija Proserpina. Así pues, eran días de júbilo y de alegría, ya que la madre, feliz por tener junto a ella a su hija, hacía que floreciera el campo y sus frutos. A su vez, era una fiesta importante para los hombres, puesto que se consideraba a Ceres la inventora de las técnicas de la agricultura.
La fiesta se inicaba el día 12 de Abril en el templo de Ceres, cercano al Circo Máximo. Se realizaba el sacrificio de una cerda y se le ofrendaban miel, leche, incienso y teas encendidas.

Todos vestían de blanco: "A Ceres le va bien el color blanco: poneos ropa blanca en la Fiesta de Ceres. Ahora ya no se lleva la lana negra" (Ovidio. Fast, IV, 619- 621).
Tras este sacrificio se iniciaban los LUDI CERERIS que duraban varios días. Lo normal era que los plebeyos invitaran a comer a los patricios, pues era una fiesta popular.
Las fuentes clásicas nos describen que se llevaba a cabo en estos días:
“Ahora es el Festival de Ceres. No necesitamos que nadie nos revele la causa. El pan de los primeros hombres eran las hierbas verdes, que ofrecía la tierra sin que nadie lo exigiese: y ya echaban mano de la hierba viva del césped, ya eran un festín las capas de los árboles con sus tiernas hojas. Más adelante, surgió la bellota; ya estaba bien la cosa con el descubrimiento de la bellota y, la dura encina suministraba recursos magníficos.
Ceres fue la primera que llamó al hombre a alimentos mejores, cambiando las bellotas por un sustento más útil. Ella obligó a los toros a meter el cuello en el yugo. Entonces por primera vez vio el sol la tierra removida. Se tenía en estima el bronce; el hierro templado era desconocido. ¡Ay!, siempre tenía que haber permanecido oculto. Ceres se alegra con la paz; también vosotros, colonos, pedid una paz perpetua y un caudillo amante de la paz.
Conviene que ofrezcáis a la diosa la espelta y el honor de la sal que chisporrotea, y granas de incienso en los viejos fuegos; y, si falta el incienso, prended teas untadas: a la buena Ceres le gustan las cosas pequeñas, con tal de que sean puras. Apartad los cuchillos del buey, oficiantes de túnica arremangada: que el buey labre; sacrificad a la marrana holgazana. El cuello que es apropiado para el yugo no debe herirlo el hacha: que siga vivo y que trabaje mucho tiempo en la tierra dura."
Ovidio, Fasti IV, 392.
Ovidio nos narra que el último día de la Fiesta de Ceres finalizaba con una procesión que llegaba hasta el Circo. Los celebrantes se lanzaban mutuamente nueces y dulces que indicaba buenos augurios.
Tras realizar una carrera de caballos, se realizaba un ritual misterioso consistente en soltar en el circo "una zorra con el lomo ardiendo con teas atadas a él" que rememoraba un hecho ocurrido en la tierra de Carséolis cuando el hijo de una campesina, tras cazar a una zorra que se había llevado aves del corral, prendió fuego a unas ramas que llevaba junto al animal. Éste, como si fuera una antorcha, huyó y a su paso, quemó todos los campos de cereales.
Acaba la narración de Ovidio afirmando: "Y para expiar su culpa, arde esta especie en la Fiesta de Ceres y perece de la misma manera que hizo perecer a las mieses"
Ovidio, Fasti, IV, 712.
Era un acto de purificación y de fecundación.

Para finalizar, puesto que acabamos de disfrutar de la fiesta de Semana Santa, una receta romana que nos proporciona Apicio cuyo protagonista es el pan y que podría resultar una buena ofrenda para la diosa Ceres.

TOSTAS DE PAN (tipo torrijas)


"Poner en leche pan. Cuando haya absorbido bien, hornear el pan durante un momento para que no se seque su interior. Sacar del horno y untar con miel mientras esté caliente, pinchar para que se empape bien. Espolvorear con pimienta y servir."

Plurimam salutem!