Sabemos que los griegos conocieron el arroz gracias a Alejandro Magno, pero que tuvo un uso bastante relegado en la cocina grecorromana, pues no tomó su auge hasta la llegada de los árabes.
Algunas
fuentes clásicas hacen referencia al arroz, veamos qué nos dicen.
Teofrasto, IV, 4, 10 nos
cuenta su empleo culinario y su cultivo: “Siembran, sobre todo, el llamado «arroz»,
con el que hacen su
hervido. Éste es semejante a la escanda y,
cuando se le quita la cascarilla, forma una especie de gachas, fácilmente
digeribles. Se parece externamente, cuando está crecido, a la cizaña, y se desarrolla dentro del agua durante mucho
tiempo. Sin embargo, no forma en lo alto una espiga, sino un a modo de
bohordo empenachado, como el mijo y el panizo”
En Ateneo,
IV 153 e leemos que era una receta típica de los indios que lo consumían
hervido: “Megastenes, en el libro segundo de su Historia de la
India, afirma que en los banquetes se les pone al lado una mesa para cada uno,
que esta es parecida a un soporte, y que sobre ella se coloca un cuenco de oro,
en el que; primero ponen el arroz,
hervido como se haría con la sémola, y después diversas viandas elaboradas
según las recetas indias”
A su
vez, Ateneo, III, 110 f habla de un pan llamado orindes que se hacía con este producto: “Menciona el pan de arroz (orindes) Sófocles en
Triptolemo, hecho de arroz, o bien de una semilla que se produce en Etiopia, y
que es parecida al sésamo”
Antimo,
Sobre la observación de los alimentos,
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“El
arroz se hierve en agua dulce. Cuando está bien cocido, se escurre el agua y se
agrega la leche de cabra. Se pone la olla al fuego y se cuece lentamente hasta
que se convierta en una masa sólida. Se come como esté caliente no frío, pero
sin sal ni aceite”
ADAPTACIÓN RECETA
Ingredientes
1 taza de arroz
2 tazas de agua
300 ml de leche de cabra
Elaboración
Cocer el arroz en agua hasta que esté cocido.
Escurrir
bien el arroz y añadir la leche de cabra.
Cocer
en el horno a 170º durante más o menos una hora o hasta que coja consistencia
sólida.
Se
sirve caliente sólo o acompañado con miel, semillas o frutas y/o frutos secos.
Prosit!
Plurimam salutem!